WELLINGTON

En la isla norte tenía que decidirme sólo por un sitio, no me daba tiempo a más. Y...ya que no me había animado a hacer Bungy jumping, pensé que no podía irme sin ir a Taupo y hacer la actividad más popular allí: skydiving..."usease"...¡tirarme en paracaídas desde 15000 pies!. ¡¡Sí, sí, a ésto sí que estaba decidida!!. Así que, en principio, no pensaba parar en Wellington más que una noche (al fín y al cabo es sólo una ciudad, no tiene nada de especial), pero como el bus de la mañana estaba lleno, me tuve que quedar.
Wellington es una ciudad pequeñita, abierta al mar, bastante nueva, agradable, y con mucho viento. Como todas las ciudades anglosajonas, combina la modernidad de los edificios altos y de cristal, con edificios victorianos (un estilo que a mí, particularmente, me gusta).
Me pase el día de museos(Te Papa, sobre la historia natural de NZ, y la City Gallery, de arte contemporáneo) y paseítos.


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